• Beneficiará a Tijuana, Playas de Rosarito y parte de Ensenada con suministro de calidad
La gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, anunció el inicio de la construcción de la Planta Desalinizadora de Rosarito, una obra estratégica que busca resolver de fondo la escasez de agua en la región.
El proyecto, respaldado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo como parte del Plan Hídrico Nacional 2024–2030, contará con una inversión inicial de 15 mil millones de pesos y tendrá capacidad de producir 2 mil 200 litros por segundo, lo que permitirá garantizar agua potable a cientos de miles de familias en Tijuana, Rosarito y parte de Ensenada. La CONAGUA será responsable de la ejecución, mientras que el Gobierno del Estado asumirá la operación y mantenimiento.
La mandataria recordó que durante décadas la población enfrentó tandeos y escasez, situación que se ha revertido gracias a las inversiones en infraestructura hídrica y al trabajo coordinado con la Federación. “Las obras de agua y saneamiento quizá no siempre se ven porque están bajo tierra, pero son las que transforman la calidad de vida de la gente”, expresó.
La planta forma parte del Programa Estatal Hídrico 2022–2027, que impulsa 58 proyectos en desalinización, saneamiento, alcantarillado y reúso de agua, con una inversión global de 24 mil 670 millones de pesos. Entre los avances destacan la rehabilitación del Acueducto Río Colorado–Tijuana (98%), la modernización de la planta La Nopalera en Tecate (74%) y la potabilizadora Abelardo L. Rodríguez en Tijuana (85%), además de la renovación de redes de agua potable en Tijuana y Ensenada (94.5%).
El secretario estatal de Manejo, Saneamiento y Protección del Agua, Víctor Amador Barragán, resaltó que Baja California se ubica entre los estados con mejor cobertura nacional, alcanzando 99.8% en Tijuana y Rosarito, 98.4% en Mexicali, 95.6% en Tecate y 89.2% en Ensenada.
Finalmente, se informó que el FAISMUN 2025, por instrucción de la presidenta Sheinbaum, se aplicará también en obras de agua y saneamiento, lo que permitirá ampliar la infraestructura a comunidades que antes quedaban fuera de estos proyectos, avanzando hacia una mayor equidad en el acceso al recurso.